Una práctica criminal y sistemática se instaló en el departamento de Córdoba, en el caribe colombiano: la violencia se ensañó contra el magisterio. Estigmatizados y perseguidos, por lo menos 139 miembros del sector educativo fueron asesinados en 34 años. Otros se salvaron refugiándose en el silencio y otros tantos en el exilio. Uno muy respetado, en México. Lo que se configuró en la región fue la muerte del pensamiento crítico. Documentar la memoria de lo que pasó es el trabajo de Entre Ríos Museo, un proyecto para testimoniar la historia.
Palabra silenciada
Base de datos: En la vista LÍNEA DE TIEMPO navegue crímenes contra educadores e hitos del conflicto armado. En AGRUPACIONES, según los filtros, conocerá tipos de crímenes, etnias y sexo. Clic en los puntos blancos para saber información de cada víctima.
Esta animación, creada con arte generativo, recrea de manera metafórica lo vivido en la región donde fueron asesinados y desaparecidos decenas de profesores. Los personajes ilustrados son solo una representación ficticia de la realidad.
El exterminio de los profesores en Córdoba
En momentos en que el equipo de investigación de Entre Ríos Museo reconstruía los hechos históricos sobre los crímenes de 139 intelectuales en el departamento de Córdoba, Salvatore Mancuso, ex comandante paramilitar, le reveló al país que varios de esos crímenes fueron ordenados por el Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), que le entregó a las Autodefensas los listados con los nombres. Lo hizo el 16 de mayo del 2023 en una audiencia pública de la Jurisdicción Especial para la Paz de Colombia (JEP). Una verdad, hasta ese momento, oculta.
30 de julio de 2023
Entre Ríos Museo
Toda palabra silenciada encuentra territorio donde dejar eco. La del profesor de Ciencias Agrícolas de la Universidad de Córdoba, Gustavo Ballesteros Patrón, hizo eco en México, muy lejos de su tierra natal, de donde tuvo que salir para salvar su vida en la década de los años 90. No contaron con esa misma suerte 139 miembros del sector educativo de Córdoba, en Colombia, que fueron asesinados.
Intentando formar a estudiantes en el pensamiento crítico, profesores de escuelas rurales del departamento de Córdoba, del Colegio Nacional José María Córdoba (Conalco) y de la Universidad pública de la región, establecieron diferentes estrategias para enseñar a mejorar los cultivos tradicionales de pancoger a indígenas y campesinos; para hacer memoria sobre las luchas de la Asociación Nacional de Usuarios Campesinos (ANUC), que reclamó tierras en medio de un despojo sin precedentes en Colombia; para enseñar educación ambiental y geografía, y criticar al desarrollismo con la instalación de una mina de níquel a cielo abierto en el San Jorge o la construcción de una represa en pleno corazón del río Sinú, entre muchas otras causas sociales.
Gustavo Ballesteros fue uno de esos profesores inquietos. Hizo trabajo social con la comunidad indígena Zenú, ubicada en la Sabana y el Bajo Sinú en Córdoba, para lo cual organizó un esquema de trabajo que le permitió crear grupos de prácticas con otros docentes y estudiantes de la universidad. Ballesteros llegó a ser decano de Agronomía de la Universidad de Córdoba, pero más temprano que tarde comenzó a recibir amenazas, según lo confirma su amigo y quien hizo parte de esos grupos de trabajo, el profesor Serafín Velásquez, hoy pensionado.
“Él siempre fue un líder, luchaba por mejorar la dignidad de las comunidades campesinas…Él tenía ya una cultura de defensa del campesinado o de la lucha por la tierra… Creó una fundación y en ese proyecto lo apoyamos todos…porque era una forma de desarrollar la extensión agrícola, que es uno de los pilares de la docencia universitaria, investigación y extensión”, cuenta Velásquez. Pero también explica que otra fue la información que pusieron a correr sobre el trabajo de Ballesteros con las comunidades, entonces lo estigmatizaron y amenazaron.
“Él fue uno de los primeros que estaba como en la mira... Entonces eso hizo que se fuera. Primero a Bogotá, luego a México”, relató su esposa Leda de Ballesteros. “Se empezaron a dar unas situaciones con todos los profesores con los que él se reunía… la situación de violencia comenzó a agravarse cada vez más y ya cuando se dan todas esas situaciones… uno tiene que replantearse qué es lo que va a hacer”, agregó.
Pero otros eran los planes que tenía Ballesteros, quien había comprado junto a su esposa una tierra en el municipio de San Carlos, Córdoba, que bautizaron “La bendición”, y que se habían propuesto convertir en un jardín botánico. El profesor hizo un inventario y recogió las especies nativas del Sinú y gestionó ante la rectoría de la Universidad y la Gobernación de Córdoba la necesidad de apoyar un proyecto ambiental como este, que le devolviera la conciencia verde a la región, pero no alcanzó a desarrollarlo. Propósitos parecidos tenían los profesores Alberto Alzate y Misael Díaz Urzola, que investigaron los impactos de la construcción de la hidroeléctrica Urrá S.A. y advirtieron que el proyecto acabaría con el pez bocachico que hacía parte de la dieta básica de los indígenas Embera Katíos, entre otros problemas. A ambos los asesinaron en julio de 1996 y en mayo de 1998, respectivamente.
El profesor Ballesteros guardaba un dolor profundo cuando recordaba los nombres de Alzate, Díaz Urzola, Francisco Aguilar, Hugo Iguarán, Julio Cuervo, todos de la Universidad de Córdoba, todos asesinados. En nombre de ellos y de los indígenas Zenú a quienes no pudo seguir ayudando en terreno, construyó su legado, pero no en Córdoba, sino en México donde ya había estudiado en el pasado y en donde se instaló.
Institución Educativa San José de Uré, Córdoba.
¿Por qué los asesinaban?
La memoria y el legado de 139 miembros del sector educativo de Córdoba, asesinados en 34 años, son un diálogo con la ausencia. Diversos actores, en su mayoría la derecha armada, los mataron. Una práctica que golpeó duramente al magisterio cordobés.
Algunos de los primeros crímenes fueron cometidos por grupos que se hacían llamar “Los mochacabezas”, de los hermanos Castaño, fundadores del paramilitarismo, y se leían como aislados. Posteriormente fueron incrementando los asesinatos y se dieron en el marco de decenas de masacres y actos violentos en una región que vio cómo nació y se fortaleció un ejército bautizado finalmente como las Autodefensas Unidas de Colombia y que solo se desmovilizó en 2006.
La historia da cuenta de que en el año de 1988 once profesores fueron asesinados. En ese mismo año se perpetraron las masacres en “Mejor Esquina”, donde perdieron la vida 28 civiles y en “El Tomate”, 16 personas. Los años 1996, 1997 y 2000 fueron los más oscuros en contra del magisterio cordobés, muestran los datos. A finales de la década de los años 90 comienza la expansión y consolidación del paramilitarismo en todo el país y en el año 2000 se configura la toma de las autodefensas del principal centro de educación superior del departamento, la Universidad de Córdoba, un hecho inédito.
¿Por qué los asesinaban? Nadie se aventuró a dar una respuesta. Oswaldo Regino, periodista del diario El Universal, estudiante de ciencias sociales y quien apoyaba las comunicaciones de la Asociación de Maestros de Córdoba (Ademacor), intentó investigar para responder esa y otras preguntas en un territorio que era una bomba de tiempo, pero lo mataron en noviembre de 1988. Ese mismo año también asesinaron al periodista William Bendeck Olivella, quien hurgó sobre las relaciones entre las mafias de la región, los desplazamientos forzados y las denuncias que algunos valientes intelectuales se atrevieron a hacer sobre el conflicto en la región y las disputas de los actores de guerra. Todo aquel que se atreviera a levantar la voz comenzó a correr la misma suerte.
La violencia arrinconó a los profesores en Córdoba por ser dentro de sus comunidades, además de maestros, líderes de opinión. Su conocimiento, mucho o poco, de la ley y la democracia, así como su capacidad de movilizar, fueron factores determinantes para perseguirlos y eso se confirma con la modalidad del crimen: la mayoría de los casos fueron asesinatos selectivos. Cuando no fue así, cuando la modalidad no fue esa sino otra, entran en consideración otros escenarios que incluyen haber caído en tomas guerrilleras de pueblos, en atentados de la subversión que operaban en la zona.
Mural en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Córdoba, Montería.
La confesión de Mancuso
El ex comandante paramilitar Salvatore Mancuso, desmovilizado en 2005 y extraditado a Estados Unidos en 2008, pidió entrar a la Justicia Especial para la Paz (JEP) para obtener beneficios judiciales. El ente, creado como justicia transicional para investigar los crímenes del conflicto en Colombia, aceptó que se realizara una audiencia única de aporte a la verdad. Si después de verificar las declaraciones de Mancuso la JEP considera que son novedosas y que los paramilitares tuvieron una función bisagra para cometer crímenes en alianza con militares, podría entrar a la jurisdicción.
Mancuso reveló que fue el DAS el que entregó las listas de los profesores que debían ser aniquilados. El DAS fue un organismo estatal encargado de realizar la inteligencia y contrainteligencia en Colombia y esta fue la primera vez que se escuchó esta vinculación con estos crímenes.
Mancuso dijo: “El DAS en Córdoba fue una institución con la que tuvimos, desde los inicios nuestros, las primeras colaboraciones… La relación tuvo que ver con el suministro de información de aquellas personas que se consideraban objetivo militar. Se compartían listas para ejecuciones que se hacían de manera extrajudicial”. Y agregó también: “A través del DAS recibimos información que llevó al asesinato de personas que eran señalados de ser guerrilleros…. profesores de la Universidad de Córdoba, estudiantes de la Universidad de Córdoba. Por ejemplo… José Antonio Alzate [Alberto Alzate] que fue alguien contra quien nosotros actuamos, el profesor Misael Díaz Urzola, de la Universidad de Córdoba, Francisco William Antonio Aguirre, Iván, el profesor Hugo Iguarán, René Cabrales Sosa, Claudio Manuel Pérez Alzate, Alvaro Taborda, Javier Galarcio Polo”.
Estos nombres hacen parte de la base de datos elaborada para esta investigación. En ella figuran datos como el secuestro de tres miembros del sector educativo por parte de las Autodefensas, a quienes señalaron de ser responsables de los atentados terroristas ocurridos en la capital cordobesa, Montería, en 1997: Álvaro Taborda, Francisco Javier Galarcio y Claudio Pérez. Claudio Pérez continúa desaparecido 27 años después. Los paramilitares también señalaron a Félix Avilés Arroyo de tener que ver con los atentados, y lo mataron. Y también acusaron al sindicalista René Cabrales, quien hoy está exiliado en Suiza. Él le dijo a Entre Ríos Museo que cuando ocurrieron esos hechos no estaba en Colombia.
En más de tres décadas de terror, a trece profesores con pertenencia étnica los mataron. Eran educadores y etnoeducadores del pueblo Zenú, del Embera Katío y del Palenque de San José de Uré. Las dos primeras comunidades fueron acompañadas y apoyadas por profesores de la Universidad de Córdoba en varios de sus procesos de fortalecimiento social. De los 139 profesores asesinados 21 militaban en algún sector político; 115 pertenecían a distintos sindicatos, entre ellos a la Asociación de Maestros de Córdoba (Ademacor). Las entrevistas a profesores sobrevivientes hechas para esta investigación, dan cuenta de la estigmatización de la que fueron víctimas. En muchos casos a algunos de ellos les prohibieron asistir a los sepelios de sus compañeros.
Si bien los crímenes de los profesores de la Universidad de Córdoba adquirieron mayor notoriedad al hacerse evidente la toma paramilitar a la institución, ocurrida durante los primeros años de la década del 2000, al ampliar la línea histórica de esta investigación se confirma que el panorama de crímenes contra docentes era mucho más extendido; y que la violencia contra los miembros del sector educativo configuró algo más profundo, que la derecha armada intentó aniquilar el pensamiento crítico en toda la región.
Geminiano Pérez, abogado, quien fue profesor de Ciencias Humanas de las carreras de Agronomía, Veterinaria y de la Escuela de Topografía de la Universidad de Córdoba, así lo cree. Se salvó de un atentado contra su vida ocurrido en el municipio de Cereté en febrero de 1988, posteriormente se exilió en Ecuador y aunque regresó a Colombia, no vive en Córdoba. “Es injusto huir para vivir, pero fue la seguridad que le pude ofrecer a mi esposa, hijos y nietos. Tuve que dejar de trabajar por el pensamiento crítico y los derechos humanos en mi tierra”.
“Palabra Silenciada” completa la fotografía de la memoria. Álvaro Taborda y Felix Avilés, hijos de dos de los profesores desaparecidos y asesinados; los etnoeducadores de la región y la familia de un investigador de la Universidad de Córdoba, exiliado en México por muchos años, se lo contaron a Entre Ríos Museo, porque toda palabra silenciada emerge.
*Entre Ríos Museo es un proyecto que vincula el periodismo, el arte y la ciencia para traducir la realidad.
*Esta investigación fue realizada gracias al apoyo del Consorcio para Apoyar al Periodismo Regional en América Latina (CAPIR), liderado por el Institute for War and Peace Reporting (IWPR)
Sala de la palabra
Los callaron es una serie de tres episodios sobre asesinatos, desaparición y exilio.
Atentado a la verdad
29:46
Cuatro profesores fueron acusados por las Autodefensas de haber perpetrado varios atentados. 27 años después familiares, amigos y una periodista reflexionan sobre lo que pasó.
Crímenes contra etnoeducadores
37:02
Los docentes de contextos étnicos cumplieron un rol clave en la preservación cultural de los grupos indígenas y afros, dando a las comunidades el poder para defenderse y luchar por sus derechos. Trece de ellos fueron asesinados.
Profesor en el exilio: lo que ganó México y lo que perdió Colombia
26:29
Gustavo Ballesteros, profesor de la Universidad de Córdoba, se exilió en México para salvar su vida. El legado que no pudo dejarle a su región, en Colombia, es valioso.
Sala audiovisual
Relatos visuales del silencio y la memoria
Mi padre, el hombre que no conocí
A la edad de cinco años Álvaro Taborda Ruiz vio cómo varios hombres derribaron la puerta de su casa en Montería y se llevaron a su padre. Aprendió a leer y comenzó a sumergirse en la biblioteca heredada pensando que de esa forma lo podría almacenar en su memoria. Veinte años después de la desaparición de su papá, la justicia le entregó los restos. Álvaro decidió reconstruir la historia en un álbum que hizo con sus propias manos para Entre Ríos Museo, y que tituló “Más allá de la esperanza”.
Sala del tiempo
Línea histórica sobre los miembros del sector educativo asesinados en Córdoba.
Asesinato de Carlos Arturo Mazo Lara
Dos hombres armados con pistolas llegaron hasta el lugar de residencia del docente y lo asesinaron.
Asesinato de Bercy Esther Suárez Puello
La docente fue asesinada por su esposo, un agente del CTI. Trabajaba en la Institución Educativa Buenos Aires, sede Changai.
Asesinato de Washington Cedeño Otero
El docente fue asesinado saliendo del colegio de la vereda Sabalito Arriba, luego de haber terminado una jornada de aseo en el plantel educativo. El docente era licenciado en lengua castellana. Este se oponía constantemente a la vinculación de jóvenes a los grupos armados ilegales. Era padre de 4 hijos, todos menores de edad.
Asesinato de Howaimar Morelo Gutiérrez
El docente fue hallado sin vida por campesinos en una finca a las afueras del casco urbano de San Antero.
Asesinato de José Miguel Chica Chica
El docente José Chica fue encontrado agonizando en la vía que conduce de Montería a Planeta Rica. El docente había trabajado durante más de 20 años en la Gobernación de Córdoba. En el 2012 había sido investigado por el carrusel de la educación.
Asesinato de Dany Marcial Hernández Ariza.
El docente Dany Hernandéz fue asesinado en un supuesto intento de atraco en el barrio Granada de Montería.
Asesinato de Jimy Alfonso Prada Vidales
Fue encontrado cerca a un puente, en el Arroyo Godín, a dos kilómetros del casco urbano del municipio de Planeta Rica, zona conocida como El Triángulo de la Muerte, controlada irregularmente por bandas criminales.
Asesinato de Argelio Domingo Doria García
Hombres armados intentaron disparar contra Yesenia Corena Ballesteros, administradora de una taberna en el municipio de Lorica, pero la mujer en un acto de supervivencia se escudó en el educador, quien terminó muerto.
Asesesinato de Alejandro José Peñata López
El docente desapareció después de haber terminado su jornada de trabajo y luego fue encontrado muerto en horas de la noche con signos de tortura.
Asesinato de Dionis Alfredo Sierra Vergara
El docente Dionis Sierra, quien estudiaba licenciatura en lengua española en la universidad de Pamplona, sede Sincelejo, era normalista y docente de primaria, fue asesinado por hombres armados mientras se encontraba celebrando el día del maestro.
Asesinato de Lucy Flórez Ricardo
La profesora Lucy Flórez fue interceptada mientras iba en una moto con su madre. La obligaron a parar y luego fue asesinada delante su mamá.
Asesinato de Nevis Hernando Bula
Seis hombres en tres motos llegaron a la casa del docente Nevis Bula, disparándole en varias partes del cuerpo hasta conseguir su muerte.
Asesinato de Tomás Aquino Buelvas
Paramilitares que se movilizaban a caballo ejecutaron hacia las 9:30 p.m., en el corregimiento San Francisco de Rayo (Planeta Rica), a seis personas, entre ellas al educador. Era licenciado en educación básica primaria con énfasis en recreación y deporte. Llevaba 28 años en el magisterio.
Asesinato de Benito Enrique Díaz Álvarez
El docente fue encontrado muerto al interior de su vivienda. Trabajaba en el Centro Trementino del municipio de San Bernardo del Viento. Venía adelantando acciones ambientales por la protección del caimán aguja.
Asesinato de Oberto Manuel Beltrán Narváez
Cuando se disponía a recoger a un familiar en la vía Lorica-Coveñas, recibió cinco impactos de bala descargados por sujetos que se movilizaban en una motocicleta. Era docente en el área de ciencias sociales y trabajaba en la Institución Educativa Julio César Miranda.
Asesinato del docente Ramiro Israel Montes Palencia
El docente Ramiro Montes fue asesinado en las inmediaciones de dos veredas: Pica Pica Nueva (Montelíbano) y Pica Pica Vieja (Puerto Libertador).
Asesinato de Rafael Antonio Cantero Ceballos
Dos hombres armados que se movilizaban en una motocicleta asesinaron de tres impactos de bala al docente Rafael Cantero, mientras se desplazaba a la sede El Diamante de la Institución Educativa Las Flores. Era licenciado en educación infantil. Daba clases a los grados 2 y 3, dedicó gran parte de su vida a trabajar por el bienestar de las comunidades educativas, donde ejerció su profesión. El docente compraba burros para posibilitar el transporte de los alumnos a las escuelas. También desarrolló estrategias ambientales sembrando huertas en los patios de las familias de los estudiantes. Rafael Cantero además denunció irregularidades en los programas de alimentación escolar en San Pedro y las Camorras en el municipio de Lorica.
Asesinato del docente Diego Rafael Covo.
El docente fue asesinado por dos sicarios mientras se dirigía a su casa en la vereda Cerro Vidales, San Andrés de Sotavento, Córdoba.
Asesinato del profesor Rigoberto Ramos Julio
Paramilitares asesinaron al profesor Rigoberto Ramos en la vereda La Rada, Moñitos. Era docente y miembro de la junta directiva de la organización no gubernamental Étnica Afrocolombiana.
Asesinato del docente Hernán Polo Barrera
Dos paramilitares de las autodenominadas Águilas Negras que se movilizaban en motocicleta lo mataron e hirieron a su hija de 16 años de edad. El hecho se presentó al frente de su residencia al sur de Montería (Córdoba), en el barrio La Pradera. El profesor Hernán Polo era dirigente del Sindicato Regional de Trabajadores y Empleados de la Educación (Sintrenal) y lideraba acciones de protesta en Montería relacionadas con las denuncias de los trabajadores administrativos de la educación con relación a nivelaciones salariales que les adeuda el Estado.
Asesinato de Ómar Jacinto Muñoz Guerra
Paramilitares que se movilizaban en vehículos llegaron hasta el lugar donde se encontraba reunido un grupo de personas y les dispararon. Asesinaron a seis personas e hirieron a una niña de cuatro años.
Asesinato de la docente Maber Madera Zurita
La docente fue asesinada mientras iba caminando hacia su casa a la altura del barrio Polo Norte. La mataron 16 horas después de que sicarios acabaran con la vida de su prima, también residente en San Antero. Era docente del Centro Educativo Nuestra Señora del Carmen.
Asesinato del docente Rafael Ramón Madrid Vega
El docente fue asesinado mientras se encontraba en la terraza de su casa. Era rector de la Normal Lácides A. Iriarte, del municipio de Sahagún.
Asesinato de Jorge Víctor Padilla Babilonia
El docente fue asesinado por dos hombres armados, en horas de la tarde, en la zona urbana de Momil. Momentos antes Víctor junto a otra persona habían estado en el corregimiento de Sabaneta recogiendo firmas para el congreso del partido político, Polo Democrático, realizado en Bogotá.
Asesinato de Álvaro Enrique Garnica Díaz
Hombres armados lo asesinaron momentos después de que asisitiera a un acto público de campaña de Carlos Gaviria, candidato presidencial por el Polo Democrático Alternativo. El docente fue abordado por varios sujetos mientras manajeba su motocicleta, luego obligado a dirigirse a un paraje solitario y allí fue asesinado. Médico veterinario y docente en el Instituto Integrado del Sinú y la Institución Educativa del Sinú (INDES)
Asesinato de Nabonazar Ojeda Almanza
El docente fue asesinado por dos sujetos que llegaron hasta la terraza de su casa y le dispararon dos veces. Había sido profesor de Santa María, Nocturno Simón Bolívar, Nocturno Manuel H. Iriarte (Montería). Los últimos 10 años como docente los dedicó al Antonia Santos.
Asesinato de Miguel Sánchez Sánchez
El docente fue asesinado por hombres armados cuando salía de su casa ubicada en el barrio Juan XXIII de la ciudad de Montería.
Asesinato de Robin Rodrigo Díaz Acosta
El docente fue encontrado asesinado junto con dos personas más en las inmediaciones de la finca Río-Bamba en Puerto Libertador. Dictaba la materia de español en el Colegio Germán Gómez Peláez del municipio de Puerto Libertador.
Asesinato del lider político Orlando Benítez Palencia junto a su hermana la docente Iris del Carmen Benítez Palencia y Francisco Mestra.
El crimen ocurrió en la zona rural del municipio de Valencia luego que Orlando Benítez e Iris Benítez realizaran una reunión con líderes comunales en el municipio de Valencia. De regreso a Montería fueron interceptados por varios hombres armados. Era licenciado en filosofía e historia. Investigador sobre la realidad geografica, histórica y cultural del municipio de Valencia. Escritor del famoso libro "Violencia en el Sinú". Se especializó en Gerencia Social. Diputado de Mayorías Liberales y segundo vicepresidente de la Asamblea departamental.También fue docente y Secretario de Educación de Valencia. Fue uno de los líderes políticos abanderados en los temas de educación. A inicios del 2000 impulsó el proyecto de creación del Comité de ciencia y tecnología, el cual se convirtió en una ordenanza que implementó la educación técnica y tecnológica. Asesor administrativo del sector educativo en la Gobernación de Córdoba. Rector del Colegio Municipal Nocturno de Valencia. Coordinador de la Universidad de Córdoba en Valencia. Vicerrector del Colegio General de la Contraloría General de la República en Bogotá.
Asesinato de Faiber Antonio Álvarez
El docente fue asesinado con tres impactos de bala mientras se encontraba sentado en su moto frente a la casa de su hermana. Era licenciado en matemática y profesor de primaria de la Insitución Educativa Augusto Espinosa Valderrama.
Asesinato de Janis Valencia Fajardo
Paramilitares del Bloque Córdoba de las AUC, quienes se movilizaban en una motocicleta, asesinaron al profesor Janis Valencia Fajardo en cercanías al corregimiento Santafé de Ralito.
Asesinato de Luis Ovidio Machado Nisperuza
El profesor Luis Machado fue asesinado en la terraza de su casa. Era ex-docente y ex-rector de la Escuela Santo Domingo Savio del sector La Represa en Cantaclaro, de la ciudad de Montería.
Asesinato de Pedro Gabriel Domínguez Arrieta
El asesinato fue perpetrado por los paramilitares Iván David Correa, alias "Ñato" y Jorge Eliécer Barranco Galván, del Bloque Córdoba de las AUC, quienes se movilizaban en una motocicleta. Pedro Dominguez era docente y rector en la escuela San José de Sahagún.
Asesinato de Ana Berenice Giraldo Velásquez
La educadora popular Ana Berenice Giraldo y otros tres integrantes de la comunidad religiosa Iglesia Latina, fueron ejecutados por miembros de un grupo paramilitar que vestían prendas de uso privativo de las Fuerzas Militares, con la aquiescencia de tropas del Ejército Nacional en la vereda Baltasar del caserío Frasquillo hacia las 2:00 p.m.
El docente fue asesinado por paramilitares. Era líder indígena del resguardo de San Andrés de Sotavento y maestro del colegio Álvaro Ulcué Chocué ubicado en el corregimiento Tuchín, hoy Municipio.
El docente fue asesinado por paramilitares. Era líder indígena del resguardo de San Andrés de Sotavento y maestro del colegio Álvaro Ulcué Chocué ubicado en el corregimiento Tuchín.
Asesinato de Rigoberto José Polo contreras
El docente iba de parrillero en una moto, saliendo del colegio, cuando lo obligaron a bajarse y lo asesinaron. Era licenciado en educación infantil. Trabajaba en el Centro Educativo El Porvenir (Tuchín) y en la Institución Educativa Cerro Vidales (San Andrés de Sotavento).
Asesinato de Manuel Ruiz Álvarez
El docente, diputado y militante del Frente Social y Político fue asesinado por dos hombres que se movilizaban en una moto de alto cilindraje en la ciudad de Montería.
Asesinato de Iván Antonio Garnica Díaz.
Hombres armados interceptaron al profesor Iván Antonio mientras este conducía su automóvil. El asesinato fue perpetrado en el barrio P5 de la ciudad de Montería.
Asesinato de Jhon Alfonso Sierra Cordero
Hombres armados que se movilizaban en una camioneta asesinaron con varios impactos de bala al docente Jhon Sierra en el corregimiento La Madera, San Pelayo.
Asesinato de Daniel Alfonso Paz Álvarez
El docente pensionado fue asesinado en la vía que comunica de La Apartada al sitio conocido como Rusia, en la región del San Jorge, en Córdoba. Recibió varios impactos de bala. Licenciado en ciencias sociales. Fue uno de los fundadores del Colegio Departamental de Bachillerato de La Apartada. Llevaba un año de pensionado cuando se lanzó a la Alcaldía del Municipio para el periodo 2001-2003, siendo apoyado por el grupo Mayorías Liberales. El profesor había denunciado irregularidades electorales como el trasteo de votos.
Asesinato de Rubit Domicó
Paramilitares de las ACCU que se movilizaban en un helicóptero ejecutaron en el poblado indígena Widó, a tres indígenas miembros del Cabildo Mayor Embera Katio y desaparecieron a 22 indígenas más, entre ellos 4 educadores, en el sitio Boca del Río Verde. Los indígenas se movilizaban en tres canoas en las que transportaban insumos necesarios para la ejecución de los proyectos de desarrollo pecuario que se llevaban a cabo en las comunidades de los ríos Verde y Sinú.
Asesinato de Rigoberto Domicó
Paramilitares de las ACCU que se movilizaban en un helicóptero ejecutaron en el poblado indígena Widó, a tres indígenas miembros del Cabildo Mayor Embera Katio y desaparecieron a 22 indígenas más, entre ellos 4 educadores, en el sitio Boca del Río Verde. Los indígenas se movilizaban en tres canoas en las que transportaban insumos necesarios para la ejecución de los proyectos de desarrollo pecuario que se llevan a cabo en las comunidades de los ríos Verde y Sinú.
Asesinato del docente William Antonio Aguirre Tirado
William Aguirre Tirado, licenciado en química y quien fue docente de la Universidad de Córdoba, fue encontrado sin vida luego de haber sido secuestrado por grupos paramilitares junto a su hijo. William Aguirre presidió el programa de atención a desplazados y guerrilleros reinsertados Revivir, además trabajó en la Corporación Autónoma Regional de los Valles del Sinú y San Jorge (CVS) y en la vicerrectoría Académica de la Universidad.
Asesinato del docente Humberto José Hernández Ayala.
El docente fue asesinado por sujetos armados y enmascarados en la vía entre el caserío Santiago Pobre y el corregimiento Santiago del Sur, del municipio de Ciénaga de Oro.
Asesinato de Amado Domicó
Paramilitares de las ACCU que se movilizaban en un helicóptero ejecutaron en el poblado indígena Widó, a tres indígenas miembros del Cabildo Mayor Embera Katio y desaparecieron a 22 indígenas más, entre ellos 4 educadores, en el sitio Boca del Río Verde. Los indígenas se transportaban en tres canoas en las que llevaban insumos necesarios para la ejecución de los proyectos de desarrollo pecuario que se realizaban en las comunidades de los ríos Verde y Sinú.
Asesinato de Hugo Iguarán Cotes
Lo asesinaron de 18 impactos de bala, seis de ellos en el rostro. El hecho se presentó a las 7:50 p.m., en la vivienda del rector electo del Alma Mater, Víctor Hugo Hérnandez Pérez, ubicada en la avenida circunvalar con calle 46, del barrio Villa del Río, en Montería, capital de Córdoba.
Asesinato de Rafael Augusto Domicó
Los victimarios llegaron al cabildo preguntando por el profesor Rafael de 36 años de edad y su hermano Federmán, una vez los localizaron les dispararon.
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Asesinato de Alfredo Enrique Álvarez Acosta
El docente fue asesinado mientras iba de parrillero en una moto.
Asesinato de James Antonio Pérez Chimá
El docente James Pérez Chimá fue asesinado en los semáforos de la calle 41 con avenida circunvalar en la ciudad de Montería. Era docente investigador del programa de Licenciatura en Ciencias Sociales. El docente de geografía trabajaba diferentes perspectivas intelectuales críticas.
Asesinato de Alberto Antonio Álvarez Macea
El docente fue asesinado en un restaurante. Trabajaba como rector de la jornada nocturna del Colegio Nacional José Maria Córdova.
Asesinato de Sixto Manuel Arroyo Álvarez
El docente Sixto Arroyo fue asesinado junto a su esposa mientras paseaban en su moto. Ambos fueron abordados por un hombre que con arma blanca los abordó de forma violenta. Trabajaba en el Instituto Técnico Agrícola (ITA).También fue miembro de la Cooperativa de Educadores de Córdoba. El docente fue uno de los defensores del ITA para evitar su traslado a Berástegui en 1967.
Asesinato del rector Arnol Enrique Castaño Pacheco
Paramilitares que se movilizaban en una motocicleta asesinaron con varios impactos de bala al educador Arnol Enrique Castaño Pacheco, rector del colegio Alianza para el Progreso en Ciénaga de Oro.
Asesinato de Misael Arcenio Díaz Urzola
El profesor Misael Díaz Urzola fue asesinado cuando se disponía a tomar un taxi para dirigirse a la Universidad de Córdoba, centro de estudios en el que trabajaba, en el área de agronomía. Fue representante de los profesores ante el Consejo Superior de la Universidad, secretario de la Asociación Sindical de Profesores Universitarios (Aspu). También fue coautor de la investigación sobre los impactos de la construcción de la represa de Urrá.
Asesinato de Adelson Manuel
El docente Adelson fue asesinado frente a su casa por un impacto de bala. Trabajaba en la Escuela Mixta de la vereda Bajo Grande. Cursaba noveno semestre de pedagogía reeducativa en la Universidad Luis Amigó.
Asesinato de Martín Lazaro
El docente Martín fue asesinado por varios impactos de bala en Puerto Libertador. En el hecho también fue asesinado un agricultor.
Asesinato de Fredys Francisco Fuentes Paternina
Cuatro paramilitares ejecutaron al docente Fredys Fuentes junto a uno de sus escoltas, Jesús Antonio Andrade Guzmán, al frente de su residencia. Según el medio digital Verdad Abierta, Salvatore Mancuso confesó el asesinato selectivo de Fredy Fuentes en una versión libre de 2008 en la que se refirió a la toma de la Universidad de Córdoba. El docente Fredys, al igual que los demás miembros de la junta directiva de Ademacor, aparecía en una lista de profesores de Córdoba amenazados de muerte. Era presidente del movimiento político Corriente de Renovación Socialista, CRS, seccional Córdoba y candidato al Concejo de Montería por dicho movimiento. Al momento de su muerte ocupaba el cargo de Secretario de Asuntos del Colegio Nacional en Ademacor.
Asesinado Arnold Enrique Sánchez Maza
El docente fue sacado a la fuerza de su casa por siete hombres armados en el barrio La Granja. Su cuerpo fue encontrado a orillas del río Sinú con signos de tortura y sevicia, en el barrio Brisas del Sinú.
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Asesinado William Jaraba Sáenz
Paramilitares ejecutaron al educador de ciencias sociales frente a su familia en su residencia ubicada en el barrio La Granja, Montería.
Francisco Javier Corrales Villalobo
Asesinato del docente Eduardo Adolfo Echevarría
El docente Eduardo Adolfo Echevarría, trabajaba en el Colegio Municipal de Bachillerato de Valencia como rector.
Asesinada Juana Evangelista Vega
Hombres armados asesinaron a la profesora de biología Juana Evangelista Vega, mientas esperaba un carro para trasladarse a una escuela en el corregimiento de Colomboy, Sahagún.
Asesinato de Félix Antonio Avilez Arroyo
Hombres armados dispararon contra el profesor Félix Avilez afuera de la casa de su suegro y huyeron en un Mazda color rojo, que se volcó haciéndolos huir a pie. El docente fue uno de los señalados por las ACCU de participar en el atentado al edificio Morindó en Montería. Este se desempeñaba además como presidente de la Asociación de Pequeños Agroindustriales de Ciénaga de Oro (Apaincoro), en la cual venía desarrollando un proyecto de procesamiento de yuca. También era un reconocido dirigente local del movimiento político AD-M19 y estaba comprometido con las expresiones de organización y movilización campesina local.
Desaparecido y asesinado Álvaro José Taborda
El docente del INEM fue desaparecido y asesinado por paramilitares de las Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá. Este fue sacado a la fuerza de su residencia y acusado de participar en los atentados dinamiteros ocurridos a finales del año 1996 contra las sedes del Fondo Ganadero de Córdoba, Ganacor, y la Fundación para la Paz de Córdoba, Funpazcor, creada por los paramilitares Fidel y Carlos Castaño. En 2017, 20 años después, hallaron su cuerpo en una fosa común y se lo entregaron a su familia.
Desaparecido Francisco Javier Galarcio Polo
Paramilitares de las Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá, ACCU, desaparecieron a Galarcio Polo junto a dos personas más. Fue sacado por la fuerza de su residencia y acusado de participar en los atentados dinamiteros ocurridos a finales del año 1996 contra las sedes del Fondo Ganadero de Córdoba, Ganacor, y la Fundación para la Paz de Córdoba, Funpazcor, creada por los paramilitares Fidel y Carlos Castaño.
Desaparecido Claudio Pérez
Paramilitares de las Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá (ACCU) desaparecieron y asesinaron al historiador Claudio Pérez. El docente fue acusado de participar en los atentados dinamiteros ocurridos a finales del año 1996 contra las sedes del Fondo Ganadero de Córdoba, Ganacor, y la Fundación para la Paz de Córdoba, Funpazcor, creada por los paramilitares Fidel y Carlos Castaño. Claudio continúa desaparecido.
Muerto en atentado Jairo Alfredo Chávez Llorente
El docente murió en el marco de un atentado terrorista contra el edificio Morindó, ubicado en el centro de la ciudad de Montería, y en el cual funcionaban las instalaciones del Fondo Ganadero de Córdoba y la planta administrativa de la CVS. Era rector de la Escuela Urbana Mixta la Pradera.
Asesinato de Luis Alfredo Narváez
Hombres armados que se transportaban en un vehículo tipo campero dispararon contra el profesor Luis Narváez en momentos en que se movilizaba en una motocicleta por la Avenida Circunvalar de la ciudad de Montería. El docente era licenciado en ciencias sociales y trabajaba en el Colegio Santa Teresita del municipio de San Pelayo.
Asesinato de Luis Sánchez Alarcón
El docente, licenciado en ciencias sociales, fue asesinado mientras se encontraba sentado frente a su casa.
Asesinato de José Alberto Alzate Patiño
Alberto Alzate Patiño, docente investigador de la Universidad de Córdoba, fue asesinado. El intelectual investigó socialmente el pueblo indígena embera katío del Alto Sinú. Fue coautor del primer informe sobre los impactos ambientales de la construcción de la hidroeléctrica Urrá. También realizó importantes aportes a la educación ambiental. Su crimen fue un golpe al pensamiento critico y frenó la producción científica en la región.
Asesinato de Bienvenido Agámez Pérez
El docente fue asesinado por hombres armados mientras se movilizaba en su motocicleta. Trabajaba en el Plantel Educativo de bachillerato de San Miguel, del municipio de San Carlos, Córdoba.
Asesinato de Armando José Humánez Petro
El docente fue asesinado mientras esperaba en su carro el cambio de semáforo de la calle 41 con circunvalar en la ciudad de Montería. Armando Humánez era licenciado en ciencias sociales y había trabajado durante 20 años en las escuelas Antonio José de Sucre y Mercedes Ábrego. También se desempeñaba como gerente de la Cooperativa Popular de Vivienda (CoopVivienda) y era Vicepresidente de la Junta de Acción Comunal del sector de Buenavista.
Asesinato del docente y líder deportivo Alvaro Iván López Doria
El docente fue asesinado en la Villa Olímpica cuando se dirigía a una reunión en la Casa de la Cultura.
Asesinato del docente Jorge Eliécer Díaz Murillo
El profesor Jorge Díaz Murillo, licenciado en idiomas, fue asesinado por sujetos que se movilizaban en una moto. El hecho ocurrió en la casa del educador, ubicada en el barrio Mocarí de la ciudad de Montería.
Asesinato de Tomy Eliécer Conde Anaya
El docente fue asesinado por hombres armados, quienes penetraron al interior de su vivienda y le dispararon en varias partes del cuerpo.
Asesinato del docente e investigador Francisco Aguilar Madera
Francisco Aguilar Madera, ingeniero agrónomo y docente de la Universidad de Córdoba fue asesinado. Este intelectual acompañó a las comunidades indígenas zenúes en sus proyectos de desarrollo, además apoyó la lucha campesina en los años ochenta.
